Una sensación tan pura que se comprime en un latido, inaudible para el resto pero como un tambor dentro de mi pecho.
Puede ser una oportunidad, verdad?
A veces cuesta tanto dejar ir las cosas. Terminamos amando hasta al odio que anida en cada fibra de nuestro cuerpo sólo por haber compartido la vida con nosotros, creciendo y alimentándose en conjunto.
Me gustaría que la corriente se lo llevase todo...lejos...tan lejos
No hay comentarios:
Publicar un comentario